El sol que cae entre tus pestañas, pues tu mirada me ilumina
más,
Porque las calles como hojas secas, estar a mis pies,
y el cielo
Que se pinta color naranja tornasol, se vuelve cálido,
y sereno;
Se vuelve un abrazo de amor, una taza de café, un
recuerdo…
Las aves que regresan para dormir, apresurados por los
últimos rayos de sol,
Las palomas que vuelan hacia las cúpulas; las campanas
de la catedral,
Las rosas rojas en el parque, y los niños que juegan
canicas;
Todo para volver a verte, todo para volver a sonreír después
de un largo día.
A veces las ruedas de los carros no dejan de girar y
girar, y me hipnotizan…
Me hacen recordar las veces que reímos juntos, bajo
las nubes de primavera,
Bajo esas fantasías de adolescentes, esos sueños
inmortales, y esos besos de pasión;
Me hace recordar porque me comprometí a amarte toda la
vida.
Eres la luz en el horizonte de mi atardecer,
Eres mi anhelo por ver salir el sol el día de mañana,
Eres quizá, lo más real que me ha pasado, y aun no me
doy cuenta.
Si conocieras los atardeceres que yo conozco, sabrías
lo bella que eres para mí…