lunes, 17 de marzo de 2014

Palomas mensajeras

Ha llegado el día que más he de lamentar
Aquel que pedí a Dios nunca ver llegar,
Donde todos mis sueños se van para no volver
Y mis esperanzas ya no tienen razón de ser.

Le he escrito la última carta de esta triste mirada,
Con la mano entumecida y el alma destrozada.
Esa tinta que se impregna raquítica
Sobre las hojas amarillentas y críticas

“Hola, espero estés muy bien, hace mucho que no sabes de mí,
Sabes que te extraño, y  te quería recordar lo que siento por ti
Ha sido muy larga la paciencia, y es una tortura esta abstinencia,
Sabes que querer es muy sencillo, pero amar tiene su ciencia”

Te sigo esperando en el mismo sitio
he dejado espacio para ti en mi piso.
Quisiera que fuera un poco más sencillo,
Que de vez en cuando fuéramos como niños

Allá van volando todas las palomas
Ellas más que nadie conocen tu idioma
Te han buscado en cada parte del mundo
Y les he pedido no perder el rumbo

Solo quiero pedirte un último favor
Cuando leas esto y sepas que no murió,
Estaré mirando cada atardecer
Por si algún día decides volver.

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