miércoles, 27 de julio de 2016

¿Y si todo se termina?

“Deje mi corazón donde tú sabes, pues una canción no es suficiente…”
Y ni con esas palabras te conquiste, ni mucho menos fornique…
Quizás más allá de las olas del mar, exista un abismo, un mundo perdido,
Uno solo para llorar por última vez, de penas sin colores ni calores,
De penas que dan más pena que orgullo.

Quizás la cuerda no esté tan apretada, o quizás el gas no es tan letal;
Quizás las botellas estaban equivocadas, o quizás ya comencé a cicatrizar.
No lo sé. Aun así me suena todo a lo mismo, la misma cantaleta.
Y esa frase dominguera que solías repetirme, para que me callara.
“Amor, ¿no quieres ir por huevos?” Una mentada de madre.

Y en otras noticias: estaba mejor pedirlo para llevar,
A fin de cuentas ni tiempo hay de disfrutarlo.
A esta misma hora mañana estaré en un lugar mejor,
A esta misma hora ayer, estaba en un lugar peor;

A esta misma hora hoy… todo se termina…

lunes, 11 de julio de 2016

La incredulidad del ser


Y dícese de aquellos hombres que lloran por las noches para que nadie los vea,
Esos entes imaginarios que muy pocas veces se logran apreciar
Muy preciados dentro del vago mundo de las letras y las botellas,
Pero muy odiados por aquellas mujeres que buscas placer animal.

Mujeres frívolas que no entienden del mundo, pues no se aventuran a conocerlo,
Quizás entre ellas se encuentre el alma que un día perdí;
Suspirando en la mesa de un restaurante fino, con una copa de vino,
Ella dio la media vuelta y salió de la eternidad donde nos encontrábamos.

No la seguí. El filete con champiñones valía más la pena.
Aun así me pregunte dónde habrán ido las ilusiones,
A qué callejón debería ir a lamentarme, y quién sería mi compañía.
Jamás lo supe. Volver, volver y volver. Las horas del reloj en la pared.

Pues soy tan incrédulo, que no pensé que se atreviera a cruzar los mares,
O que tirara a un lado los pétalos de esa flor marchita y bohemia,
Esa esencia que un día nos mató a ambos, colgados de la pared,
Esa fragancia vieja, como la melodía que no me saco de la cabeza.



Dedicado a una gran amiga K.J.S
"La mente no engaña al corazón"



viernes, 1 de julio de 2016

Y sigo sangrando


La noche que cae sobre mi cabeza, y asfixia mis perversiones
es la misma arma que lame mi cuello y alborota las neuronas,
esas neuronas que claman por virginidad y santidad,
esas neuronas que exigen un pedazo de esperanza.

Si ahogo los gritos y los llantos en barriles de cerveza,
no satisfago la totalidad de mis sueños mas profundos.
Si mendigo por migas de cariño en los callejones de la pubertad,
no me siento realizado ni como hombre ni como mujer.

Castillos rodearon los abandonados y apestosos huecos de mi razón
y entendimiento que jure proteger, ¿a qué costo?
le pregunto a diario al carnicero que vende boletos de lotería,
al ese rufián que gana todas las apuestas políticas en esta sociedad

-Le pregunto su real majestad, ¿es este el camino que ud. ha elegido? 
-No, pero es este el camino, que me toco andar, a rastras y con los pies ensangrentados
porque de otro modo, qué valor tendría la vida, si solo reímos y hacemos el amor.